Nuestro proceso productivo comienza con la adquisición de semillas chaqueñas de girasol y soja.
A partir de allí, seguimos una serie de etapas controladas:
Extrusado y prensado
Las semillas ingresan a la línea de extrusores y prensas, donde se separan dos productos principales:
Expeller (subproducto rico en proteínas, ideal para alimentación animal).
Aceite crudo desgomado.
Desgomado y refinado
El aceite crudo pasa por un proceso de desgomado y acondicionamiento, dejándolo listo para su refinado, donde se ajustan parámetros de calidad como color, sabor y estabilidad.
Fraccionado y envasado
Finalmente, el aceite refinado se fracciona y envasa en distintas presentaciones comerciales, asegurando un producto listo para el mercado, con trazabilidad completa desde la semilla hasta la botella.
Combinación equilibrada de aceites vegetales que ofrece un excelente rendimiento y sabor neutro. Perfecto para uso diario en cocina, frituras y preparaciones industriales.
Aceite vegetal refinado de alta estabilidad y pureza. Su textura liviana y sabor neutro lo convierten en una excelente opción para la industria alimenticia y gastronómica.
Fuente natural de ácidos grasos esenciales, con un perfil equilibrado y alto valor nutricional. Ideal para cocinar, freír o como base para alimentos procesados.
Aceite 100 % puro de girasol, elaborado con semillas seleccionadas y procesos que garantizan su calidad y pureza. Ideal para todo tipo de preparaciones, gracias a su sabor suave y natural.